La profesora de lengua castellana
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Pintura: Carmen Mansilla |
Una joven profesora de lengua castellana se enamoró de un apuesto estudiante japonés. La profesora le enseñó todas las palabras que el joven necesitaba aprender y que ella quería escuchar. El estudiante aprendió poco a poco y con entusiasmo logró en corto tiempo dominar la lengua. A la maestra, le gustaba y se divertía con sus faltas gramaticales y los excesos con la “ele”. Le parecía escuchar de sus labios las historias orientales más hermosas. Cuando aprendió a hablar español, el japonés regreso a su país. La profesora se quedó con la añoranza y con el método más eficaz para enseñar un idioma.
Beatriz Giovanna Ramírez
Sabés que tengo mucho respeto por toda tu obra, pero debo decir, que este cuento es uno de los mejores que he leído. No hay tiempo para detenerse ni para que nada te detenga, seguí!
ResponderEliminarOs
Gracias, Osvaldo, valoro tus palabras. Un abrazo muy largo.
ResponderEliminarMuy buen relato, Bea. Todo tan sencillo, tan cercano y sin embargo tan buena literatura. un abrazo.
ResponderEliminarUn abrazo, Antonio.
ResponderEliminarBuen relato Beatriz.UN saludo
ResponderEliminarwww.poesiadesantiagomedina.blogspot.com/
Gracias, Santiago.
ResponderEliminarLa inocencias de las lenguas.
ResponderEliminar¿La lengua es inocente?
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